Trastornos de la Conducta Alimentaria

Ortorexia: obsesión por la comida sana

22 de Noviembre, 2020 Miriam García Ortiz

Esta nueva alteración, que actualmente no está reconocida dentro del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), fue definida por primera vez por el médico estadounidense Steve Bratman en un libro titulado “Health Food Junkies” -Adictos a la comida sana.

Ortorexia, con sus raíces en el griego (ortho, justo, y orexia, apetencia) vendría a significar “apetito justo o correcto” pero en realidad consiste en un cuadro obsesivo-compulsivo que conduce a restricciones alimentarias severas con las complicaciones que conlleva, incluido el aislamiento social grave.

 

¿Se trata de un intento más de “patologizar” de los expertos o de un problema real?

Sin duda, es un problema real, producto de una relación NO saludable con la comida sana.

Prestar atención a lo que se come y mostrar interés por una alimentación saludable o la nueva moda del “clean eating”, que consiste en llevar una alimentación sana junto a ejercicio físico, pueden ser medidas que en general ayuden a mantener y potenciar la salud y el bienestar. Sin embargo, llevadas al extremo, pueden afectar de lleno en la vida cotidiana de las personas. Aunque todavía escasos, los estudios en torno a la ortorexia parecen confirmar que detrás de esta obsesión por “comer limpio” subyace con frecuencia un trastorno psicológico.

Puede comenzar con la intención de mejorar la salud, tratar una enfermedad o perder peso. Y, ¿qué problema habría en eso? Cuando esa intención se lleva al extremo, la dieta pasa a un primer plano, exigiendo un gran autocontrol llegando la obsesión por comer sano a un nivel psicopatológico significativo.

Esta obsesión conduce a la persona a controlar todo lo que se come, convirtiéndose la comida en el eje central de su vida. A

Así, la preocupación patológica por la comida sana, lleva a las personas con ortorexia a consumir exclusivamente alimentos diferencia de otros trastornos alimentarios en los que las preocupaciones giran en torno a la cantidad de alimentos y a la apariencia física (anorexia y bulimia), en la ortorexia, estas preocupaciones se asocian más a la calidad de los alimentos.procedentes de la agricultura ecológica, es decir, que estén libres de componentes transgénicos, sustancias artificiales, pesticidas o herbicidas. Esta conducta restrictiva lleva a suprimir alimentos como la carne, las grasas, lácteos y/o alimentos que contienen sal y azúcar en exceso, colorantes o conservantes y que, si no se reemplazan correctamente, conllevan carencias nutricionales.

 

Como en los demás Trastornos de la Conducta Alimentaria, la ortorexia implica consecuencias físicas propias de la inadecuada alimentación, así como psicológicas (ansiedad, depresión, trastorno de ansiedad por la enfermedad o hipocondría, aislamiento, etc.), siendo estas últimas las que requerirán una intervención más especializada y prolongada. No se ha especificado un tratamiento diferente al resto de los TCA, por lo que se entiende que la ortorexia debería ser abordada por un equipo multidisciplinar y desde una orientación, preferentemente, cognitivo-conductual.

Psicóloga de ABB Málaga Grupo Ita