Ayuda adolescentes conflictivos
Convivir con un adolescente conflictivo, ya sea en el ámbito familiar como en la escuela, no es fácil. Las mentiras, la transgresión de las normas, los desplantes, la agresividad, las amenazas, la violencia,… deterioran rápidamente las relaciones. Para los adultos es una situación muy frustrante, porque no saben cómo ayudar. Si se enfrentan mal, si evitan las situaciones conflictivas mal, si intentan hablar mal,… y así se van sucediendo las recriminaciones y los gritos. No hay que olvidar que, tras la fachada desafiante y provocadora del adolescente, suelen haber sentimientos de desamparo, de falta de control sobre su vida, miedos, inseguridad, soledad, tristeza. Tienen problemas para gestionar la ira y la frustración. Hay una importante incapacidad para controlar los impulsos que les lleva a conductas de riesgo, frecuentemente se alejan de sus amistades de siempre y encuentran un falso refugio en entornos más marginales. Los problemas y los fracasos se suceden y no saben cómo cambiar.
Para ayudar a romper esta situación hay que pedir ayuda a los profesionales y cuanto antes mejor, para evitar que empeore aún más la situación.
Parece que no haya salida, pero la hay. En base a nuestra experiencia, la mayoría de los adolescentes conflictivos que llegan a nuestros centros recuperan su vida. Aunque en un primer momento les cuesta reconocer que tienen un problema, a través del proceso psicoterapéutico conectan con sus emociones y aprenden a gestionarlas sin recurrir a la “huida” o la agresión. El tratamiento se basa en tres pilares que tienen como objetivo el cambio:
- Trabajo personal de psicoterapia
- Apoyo/asesoramiento de la familia
- Reorientación académica
Si un miembro de su familia tiene problemas de comportamiento que le preocupan, puede consultarnos su caso en el teléfono gratuito 261 – 4769077 o bien, puede concertar una visita diagnóstica online o presencial.